7.7.14

Neila dixit

Salvador Vaquero no ceja. La última entrega de su serie de entrevistas Letras desnudas está dedicada al poeta Manuel Neila y en ella el autor de El camino original dice entre otras cosas:
-¿Qué ha cambiado en la poesía de Manuel Neila desde Clamor de lo incesante hasta hoy?
-Quiero suponer que, durante este espacio de tiempo, he aumentado el caudal de conocimientos, he conseguido ahondar en los temas que abordo y mejorar el vigor expresivo. Lo que sí puedo asegurarte es que me he mantenido firme en mi proyecto original, fiel a mi vocación y conforme con mi destino.

-¿Hacia dónde apuntan tus nuevas composiciones?
-Trabajo en un libro abierto de proverbios y cantares, que titulo Al norte del futuro. Estoy a punto de concluir un nuevo poemario, Aposento en el aire, donde agavillo composiciones escritas durante los diez últimos años. Ambos están representadas en El camino original (Antología poética, 1980-2012), que acaba de aparecer en la editorial Renacimiento. Y perfilo, en fin, una nueva serie de poemas en prosa, El sol invisible, que en un futuro formará parte, junto con los que integran El sol que sigue, del volumen El mundo en que anduve.

-Una anécdota divertida.
-Aunque no es tan sugestiva como El sueño de la mariposa, del filósofo Chuang Tzu, recuerdo con interés esta anécdota de David Foster Wallace: "Había una vez dos peces jóvenes que iban nadando y se encontraron por casualidad con un pez más viejo que nadaba en sentido contrario; el pez más viejo los saludó con la cabeza y les dijo: 'Buenos días, chicos. ¿Cómo está el agua?' Los dos jóvenes siguieron nadando un trecho; por fin uno de ellos miró al otro y le dijo: '¿Qué demonios es el agua?'".