27.6.12

La tele

Uno por la noche, como casi todos los mortales, ve la tele. A esas horas -de las nueve en adelante- hago eso por costumbre. Primero el informativo (hasta ahora, el de la 1), luego, El Intermedio (que no va demasiado bien) o un documental de la 2 (que si el último emperador de China no están a mi alcance). Me suelo dormir antes de que termine. Madrugo mucho y no me echo la siesta. Bueno, y que los niños cansan.
Cuando se anunció el nuevo programa de entrevistas de Julia Otero me alegré. Volvían, por fin, modos mejores, aunque fueran de otros tiempos. No vi la primera entrevista, con el torero Cayetano (no me gusta escuchar a los toreros, prefiero verlos torear), pero sí la segunda, con Vargas Llosa, el escritor perfecto, se podría decir. Leí en el periódico que la protagonista de la tercera iba a ser Ana García Obregón y mi gozo, ay, terminó en un pozo. Se ve que no hay manera. El lunes pasó por allí, lo sé, Alejandro Sanz. Me imagino que Mario Vaquerizo está al caer. Que no me esperen.