24.12.11

Nota de prensa de Clarín

En el número 96 de Clarín. Revista de nueva literatura la catedrática de Literatura Rosa Navarro Durán descubre que una de las obras clásicas de la literatura catalana, la novela Curial e Güelfa, es en realidad una falsificación.
El erudito Milá y Fontanals en 1876 anunció el descubrimiento del manuscrito de una novela catalana del siglo XV, Curial e Güelfa; pero se calló un dato esencial: que la había escrito él mismo.
Rosa Navarro Durán aporta las pruebas de la verdad de lo afirmado ya hace veinte años por Jaume Riera i Sans. Se las proporciona la propia literatura, porque en el texto del Curial e Güelfa pueden verse claras huellas de la lectura de La Celestina, del Lazarillo, del Cortesano de Luis Milán, del Quijote, de las Novelas ejemplares, del Marcos de Obregón… y de Los novios de Manzoni, la obra que tanto le gustaba al cultísimo Milá.
Además, el modelo que guió a la ingeniosa pluma del genial creador fue Tirant lo Blanc. El Curial encierra sorprendentes misterios, pero su autor dejó en la propia obra claves para que los resolviéramos y para que gozáramos de esa espléndida creación romántica, que calificó el propio Milá entre “gótica y renacentista”: gótica a lo Walter Scott y renacentista porque estaba creada por uno de los escritores de la Reinaxença. La ironía que recubre esa divertida historia medieval nos ayuda a descubrir esa genial superchería.